Un bellísimo cartel de Roberto Domingo, orlado por la bandera republicana, anunció la primera corrida celebrada en esta plaza, que fue el 17 de junio de 1931, a beneficio del paro obrero.
Mató el primer toro, llamado “Hortelano”, el diestro Diego Mazquirián “Fortuna”, aquél que estoqueara uno escapado en plena Gran Vía.
También figuraban en cartel Nicanor Villalta y Marcial Lalanda, con otros.
Contaba con Marcial que hubo tal atasco de coches, que algunos toreros llegaron tarde.
Don José Espeliú fue el arquitectos y esforzado promotor de la iniciativa, viejo sueño de Gallito.
Las obras costaron siete millones quinientas mil pesetas, con las que se costeó la obra mozárabe, con un ruedo de sesenta metros de diámetro y capacidad para más de veintidós mil espectadores.
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