![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUOjSSkFQp00xOtSUelgYjLeIPuATVGw9MYf59W2Kr-F635G4OjFNMKEm1_A3TmwxYAgLeHKEMLvLal1RFumJ8F1LjPxIEFlIUO7VP5-mxVhnDZx4cFkNJGRlT7sWMVGTQUDRMTpU0cFg/s400/Camarero-10.gif)
- Los testículos del toro, señor -responde el camarero- Pero toro de lidia, no cualquier toro. ¡Una delicattessen!
El turista lo prueba y queda encantado. Tanto, que cada día pide para comer el mismo plato.
Al tercer día, el plato se ve como muy esmirriado con unas criadillas diminutas y el turista pregunta el por qué. A lo que el camarero responde:
- Compréndalo señor, ¡no siempre pierde el toro!
No hay comentarios:
Publicar un comentario