La
filosofía de los productos llamados de "usar y tirar" obedece a las más
agresivas técnicas de marketing, pero en muchos casos cuentan también con la
predisposición del consumidor que busca lo más práctico.
Un
buen ejemplo es el de los mecheros. En un principio, los mismos modelos que
existen hoy en el mercado eran rellenables, hasta que se demostró que nadie hacía
uso del sistema. Resultaba
más cómodo tirarlo y comprar otro. Las
estilográficas y bolígrafos recargables también están en franco desuso.
Una
de las víctimas principales de esta tendencia de consumo han sido los
instrumentos del afeitado clásico; cuchilla o navaja, brocha y barra de jabón.
Incluso el afeitado eléctrico se ha visto relegado por las hojas con soporte de
plástico incorporado.
Cubiertos, platos y vasos de plástico, servilletas de
papel..., el mercado se ha visto inundado por este tipo de productos, que son
los causantes del incremento en el volumen de residuos y del derroche de
recursos en su producción. La
mayoría de ellos presentan la alternativa clásica que, aunque en ocasiones no
resulta tan cómoda, sí es lo suficientemente ecológica y económica como para
tenerla en cuenta.
Fuente: El hogar ecológico - Ed. Plaza
& Janes
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