Una noche, una pareja está en la cama y el marido suavemente acaricia el brazo de su mujer.
La esposa se voltea y le dice:
- Lo siento cariño, pero tengo cita con el ginecólogo mañana y quiero estar fresca.
El marido, rechazado, se da la vuelta y trata de dormir.
Unos minutos mis tarde se voltea de nuevo y destapa a la esposa, susurrándole al oído:
- ¿Y también tienes cita con el dentista mañana?
La esposa se voltea y le dice:
- Lo siento cariño, pero tengo cita con el ginecólogo mañana y quiero estar fresca.
El marido, rechazado, se da la vuelta y trata de dormir.
Unos minutos mis tarde se voltea de nuevo y destapa a la esposa, susurrándole al oído:
- ¿Y también tienes cita con el dentista mañana?
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