19 abr 2012

Vagina virtuosa

Un hombre se sienta en un tren frente a una voluptuosa rubia, que lleva una pequeña minifalda puesta. Aunque lo intentaba, no era capaz de retirar su mirada de sus enormes muslos, y de tanto fisgonear se da cuenta que la chica anda sin ropa interior.
La rubia se da cuenta de que el la mira justo "ahí" y le dice:
- Me estas mirando ahí, ¿verdad?
- Si, disculpa -responde sonrojado el hombre tras retirar la mirada.
- Esta bien no te preocupes -responde la mujer- ¿sabes? soy muy habilidosa, mira esto, voy a hacer que te guiñe un ojo.
Dicho y hecho, el hombre mira asombrado como esa parte íntima le guiña y da un par de pestañeos.
El, totalmente asombrado, le pregunta:
- Que "otras cosas" sabe hacer.
- Puedo también hacer que te tire un besito.
La chica sube un poco más la falda para que el hombre tenga una vista completa y despejada. Acto seguido increíblemente contrae sus labios y le tira un beso con sonido incluido. El hombre no podía creer semejante expresión de raro talento.
- Ven y siéntate a mi lado –le sugiere la rubia.
El hombre ni corto ni perezoso, se sienta al lado de ella y la rubia le pregunta sugestivamente.
- ¿Quieres meterme un par de deditos?
Paralizado de asombro el hombre le dice:
- ¿No me digas que también puede silbar?
  

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